sábado, 13 de junio de 2009

Desde la Trinchera...

11/06/09
SUEÑOS DE NIÑEZ

Pedro está sentado frente a su televisor esperando que el partido empiece; ha esperado mucho para ver a su selección, le hubiera gustado ir al estadio pero su situación económica no le alcanza. Él debe mantener a su esposa, sus dos hijos y de vez en cuando dar algo a sus padres.
“.Sueños de niñez convertir alguna vez
un gol a estadio lleno, eludiendo al portero.
En casa faltaba el pan y a veces faltaba el té
y nunca dejó de soñar con algún día ser un crack” *.
En la antesala del partido pasan imágenes de los alrededores del estadio, y en una de ellas se ve a un niño en compañía de su padre. Esa imagen hace recordar a Pedro cuando era pequeño. Recuerda que cuando tenía 9 años quería ser futbolista; por ello los partidos que disputaba en el arenal del distrito donde vive los tomaba en serio.
“Sueños de niñez, pichangas de barrio,
cara sucia, sudor y barro”*.

Conforme pasaron los años tuvo que compartir las clases en la escuela y en las tardes apoyar en la carpintería de su padre; en ese entonces ya las pichangas eran solo los fines de semana. Pedro tuvo que sacrificar su sueño de ser futbolista, la condición económica de su familia lo obligaba a dedicarle cada vez mas horas a la carpintería. A veces se paraba en la esquina del barrio frente al kiosko de periódicos y ojeaba los titulares de deportes, a veces solía imaginar que el era quien estaba en la portada luego de algún triunfo destacado.
“Zapatillas rotas, cara sucia y los retos de mamá,
pero es lindo jugar y en su mente imaginar
que las calles son estadios y las balas papel picado,
las sirenas eran cantos y un gol ahogaba el llanto”*.

Pedro caminaba 15 cuadras diariamente para llegar a su colegio; a veces las calles se tornaban peligrosas, ya que los enfrentamientos entre pandillas eran frecuentes; incluso varios de sus amigos integraban ya alguna, y otros consumían drogas; pero el pudo estar alejado de todo eso ya que los sabios consejos de su padre y el estar ocupado hizo que se alejara de las calles. Dentro de poco iba a acabar el colegio, y a pesar que quería estudiar era mas urgente que él ayudará con las urgencias económicas de la casa.
“Sueños de niñez convertir alguna vez
un gran gol a la vida y encontrar una salida,
tan solo una ilusión al destino doblego
y los sueños de un niño que en crack se convirtió”*.

Actualmente Pedro trabaja de obrero en una construcción. Él quería llegar muy alto siendo futbolista pero no pudo; ahora desde lo alto del edificio de 20 pisos que están construyendo ve lejano esos momentos, pero guarda gratos recuerdo de su niñez.
El partido acabo, una vez mas su selección perdió; la impotencia y el desanimo se apoderan de Pedro. Apaga el televisor y se va a su cuarto; mañana debe levantarse a las 6 de la mañana para salir al trabajo. Acostado en su cama sueña estar en una cancha. La realidad lo obliga a gambetear las combis, esquivar el tránsito y meterle un gol a la pobreza. La cancha, las ilusiones, siempre estarán presenta, por mas que la realidad sea fría y dura.
“Sueños de niñez, pichangas de barrio,
cara sucia, sudor y barro”*.


* El Crack - Los Miserables

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