viernes, 22 de mayo de 2009

El Ojo

Por la ruta del perro

Lo más importante para mi es alimentarme, de eso no hay dudas, en realidad la mayor parte del día me dedico a buscar algo que pueda meter en mi hocico y calmar mi apetito.

Soy un perro callejero y desde que tengo algún recuerdo la calle siempre a sido mi lugar, no tengo nombre y no lo necesito porque nadie me llama, ando solo por esta ciudad, hay algunos amigos que aparecen de vez en cuando y paseamos por muchos lugares buscando aventuras y nuevos refugios. Pero, no todo es tan bonito como parece, a mucha gente no le agrada mi presencia y siempre me botan de cualquier lugar, insultándome y golpeándome con lo primero que encuentran, pero tampoco puedo negar que existen algunos seres que se apiadan de mí y me ofrecen algo de comida.

Cuando ando por las calles veo de todo ya que tengo la facilidad de estar en cualquier rincón sin que las personas tengan que disimular su actitud ante mi presencia, no me consideran una amenaza ante sus acciones mas primitivas (debería ser espía, estoy perdiendo dinero), he visto de todo, desde gente comiendo en basurales, a mendigos haciendo sus necesidades en la calle, a parejas de pirañitas teniendo sexo completamente intoxicados de tanto inhalar pegamento en las escaleras de alguna casa abandonada, etc. Pero me ven y no les importa, es como si pasara un fantasma del cual no hay que preocuparse, que ironía porque sin embargo ahora les cuento todo esto que leen.

También quiero que se enteren del abuso exagerado que se comente contra nosotros los perros de la calle. Por ejemplo, a mucha de la gente a la que no le agradamos, piensa que la forma más fácil de librarse de nosotros es envenenándonos o ahogarnos en un balde o por último aventarnos al río en un costal cuando estamos aún cachorros.

Hay muchos casos de abuso pero el que les cuento a continuación esta entre los peores; se trata de los instructores de formación militar que van por las calles buscando cachorros indefensos y los dan a los alumnos jóvenes para que los críen como a una mascota verdadera y una de las pruebas para poder graduarse es matar a su tierna mascota a la que criaron y compartieron los momentos más hermosos de ver crecer a un cachorro, lo tienen que abrir y sacarle las tripas a veces en el caso extremo de la aberración comerse alguna visera. Yo seré un perro pero esos humanos son un asco de gente, no se que pueden tener en la cabeza, son seres desalmados, un perro nunca sería tan cruel. Quién es el animal, ellos o yo?.

“El perro es un amigo que siempre esta en las buenas y en las malas, te pueden dejar solo, se pueden ir los hijos, las parejas, etc; pero tu perro nunca se irá, el se quedará contigo hasta el final”.

Hay quienes dicen que el perro es el mejor amigo del hombre, si creemos que es una frase verdadera no permitamos que los perros sean maltratados; ellos no le hacen daño a nadie y necesitan nuestra ayuda para no acabar en manos de algún milico desalmado que los quiera destripar.

“...El perro estaba revolviendo basura buscando algo que comer,
quise acercarme y ofrecerle mi ayuda pero el se hecho a correr...”

Attaque 77 - “El Perro”

Luis Artieda
camaleonarti@hotmail.com
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programamixtura@gmail.com

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